Por: 7ma Medios

¿QUIÉNES ASPIRAN AL SUBSIDIO?

Para acceder a esta cobertura del 100%, es necesario cumplir con las siguientes condiciones:

• Ingresos netos: Menores a 1,5 haberes previsionales mínimos ($389.398). En hogares con convivientes con CUD (Certificado Único de Discapacidad), el límite es de 3 haberes mínimos.
• Medicina prepaga: No estar afiliado a ninguna.
• Propiedades: Poseer como máximo un inmueble.
• Vehículos: Solo pueden ser propietarios de vehículos con más de 10 años, salvo excepciones por discapacidad.
• Otros activos: No se permite la posesión de aeronaves, embarcaciones de lujo o activos societarios significativos.

Si un jubilado no cumple con estos criterios pero el gasto en medicamentos representa al menos el 15% de sus ingresos, puede solicitar una evaluación excepcional mediante un informe social y revalidación médica.

¿CÓMO Y DÓNDE GESTIONAR EL SUBSIDIO?

El trámite puede iniciarse de dos formas:

1. Online: A través de la página web de PAMI, usando un celular o computadora.
2. Presencial: En cualquier agencia del PAMI, previa solicitud de turno online para agilizar la atención.

DOCUMENTOS REQUERIDOS

• Documento Nacional de Identidad (DNI).
• Receta médica con diagnóstico detallado o codificación CIE-10.
• Declaración jurada de datos personales (descargable en la web del PAMI).
• Formulario de medicamentos para quienes soliciten más de cuatro productos.

¿QUIÉN PUEDE INICIAR EL TRÁMITE?

El procedimiento puede ser llevado a cabo por el afiliado, un apoderado o un familiar designado.

MEDIDA SOCIAL CLAVE

Según el director ejecutivo de PAMI, Esteban Leguizamo, este subsidio busca garantizar el acceso a medicamentos esenciales sin excluir a nadie por razones económicas. Además, la entidad aseguró que no se han eliminado medicamentos del vademécum vigente.

¿CRÍSIS O COMPROMISO?

Aunque el PAMI busca «reforzar su compromiso con la población jubilada», la realidad parece contar otra historia. Muchas oficinas de PAMI amanecieron con cientos de jubilados que se agolparon para tramitar el subsidio, exponiendo graves falencias en la organización. “Tengo la mínima, no llego a fin de mes, ni los impuestos pago por pagar los remedios”, lamentó una mujer mientras esperaba horas para ser atendida.