Por: 7ma Medios
La Libertad Avanza (LLA) consolidó su posición en el escenario político tras imponerse con el 40,68% de los votos en las elecciones legislativas de medio término. El resultado, con una participación del 67,92%, reconfigura la composición del Congreso y otorga al presidente Javier Milei una base más sólida para avanzar con su programa de reformas estructurales.
“Este será el Congreso más reformista de la historia argentina”, afirmó Milei durante su discurso tras conocerse los resultados, en un mensaje que combinó celebración y advertencia.
La renovación de 127 bancas en Diputados y 24 en el Senado modificó el equilibrio de fuerzas. En la Cámara Baja, LLA pasará de 37 a 94 diputados, superando el umbral que le permite sostener vetos presidenciales y bloquear intentos de juicio político.
Con el respaldo de aliados del PRO y de pequeños bloques provinciales, el oficialismo queda cerca del quórum de 129 votos necesario para sesionar sin obstáculos. El peronismo, bajo la nueva denominación Fuerza Patria, conserva la primera minoría con unas 97 bancas, pero pierde influencia respecto a la composición anterior.
En el Senado, los libertarios también dieron un salto: de 6 a 20 escaños, transformándose en la primera minoría y debilitando la histórica mayoría peronista.
“El mapa político cambió. Ahora Milei tiene las herramientas, pero también la responsabilidad de usarlas con prudencia”, analizó un consultor político cercano al Congreso.
El Gobierno se propone acelerar su paquete de reformas estructurales, con foco en tres áreas: mercado laboral, sistema tributario y políticas previsionales y educativas.
La reforma laboral busca mayor flexibilidad y previsibilidad para las empresas. Incluye la revisión de convenios colectivos, la diferenciación clara entre trabajo autónomo y dependiente, y la posibilidad de acordar salarios atados a productividad o incluso en dólares. Desde los sindicatos ya anticipan resistencia.
En materia tributaria, el objetivo es reducir la presión fiscal y simplificar el sistema. Entre los puntos centrales se destacan la baja del impuesto a las ganancias, la eliminación gradual de retenciones a las exportaciones y beneficios para atraer inversión extranjera.
El Gobierno también proyecta ajustar el sistema previsional para hacerlo más sostenible y avanzar hacia un esquema educativo con mayor competencia entre instituciones públicas y privadas. Los vouchers educativos figuran entre las herramientas en estudio.
“Estas reformas son esenciales para superar la crisis y devolverle libertad a los argentinos”, sostuvo Milei en su mensaje a la militancia libertaria.
Aunque el oficialismo emerge fortalecido, la nueva composición no garantiza un camino libre de obstáculos. Los gobernadores peronistas y algunos mandatarios provinciales no alineados mantienen capacidad de presión en temas presupuestarios y de coparticipación.
Analistas coinciden en que Milei deberá tejer acuerdos con sectores opositores, especialmente con el PRO de Mauricio Macri, que fue clave durante la campaña. “Sin diálogo real, las reformas podrían volver a trabarse”, advirtió un dirigente radical con experiencia legislativa.
El presidente ya evalúa cambios en su gabinete y un relanzamiento de la gestión con la legitimidad que le otorgan las urnas. Sin embargo, los próximos meses serán decisivos para medir si la contundente victoria electoral se traduce en transformaciones concretas o en nuevas tensiones dentro del Congreso.