Por: 7ma Medios
La Justicia Electoral inició el escrutinio definitivo de las elecciones nacionales en la provincia de Buenos Aires, un proceso clave que podría alterar el mapa político. Con diferencias mínimas en distritos como Santa Cruz, La Rioja, Chaco y Buenos Aires, el resultado final aún está abierto.
El recuento se realiza en el Pasaje Dardo Rocha, en La Plata, bajo la supervisión de la Junta Electoral Nacional, integrada por Jorge Di Lorenzo, Hilda Kogan y Alejo Ramos Padilla. Este procedimiento, a diferencia del escrutinio provisorio, tiene validez legal y puede introducir correcciones en los resultados. Se lleva a cabo mesa por mesa, comparando actas y, en caso de discrepancias, se reabren las urnas.
Desde Fuerza Patria siguen con atención el conteo en Buenos Aires, donde la diferencia entre Diego Santilli (LLA) y Jorge Taiana (FP) fue de apenas 46.600 votos. “La diferencia es ajustada y los votos nulos o impugnados pueden ser determinantes”, reconoció un apoderado del PJ. Según el conteo provisorio, hubo 206.177 votos nulos, 4.277 recurridos y 2.122 impugnados, cifras que abren la posibilidad de modificaciones.
En Buenos Aires, con el 99% de las 38.760 mesas escrutadas, La Libertad Avanza obtuvo 3.605.127 votos (41,45%), mientras que Fuerza Patria alcanzó 3.558.527 (40,91%). Esa mínima distancia mantiene la expectativa por el escrutinio definitivo, que podría incluso modificar la distribución de bancas en el Congreso.
En Chaco, el resultado también está en suspenso. Con casi la totalidad de las mesas computadas, LLA reúne 265.098 votos (45,57%), y Fuerza Patria, 253.517 (43,58%). La diferencia de poco más de 11 mil votos puede definir la composición de las bancas en el Senado.
En Santa Cruz, la paridad es aún mayor: apenas 728 votos separan a las dos fuerzas más votadas. En La Rioja, la distancia fue de 621 sufragios, entre Federales Defendamos La Rioja y La Libertad Avanza. También hubo márgenes estrechos en Chubut (1.442 votos), La Pampa (2.093), Río Negro (2.101) y Corrientes (6.754).
Una de las particularidades de estos comicios fue la implementación de la Boleta Única de Papel (BUP) en todo el país. Su debut dejó algunos interrogantes sobre los votos mal marcados o en blanco, lo que podría generar revisiones durante el escrutinio.
Los primeros análisis advierten un aumento significativo en el voto en blanco, especialmente en las provincias que eligieron senadores. En Chaco, por ejemplo, el voto en blanco alcanzó el 9,25% en la categoría de Diputados. En Entre Ríos, el porcentaje fue similar: 9,9%.
“Los niveles de voto en blanco con la Boleta Única son un llamado de atención. Hay que observar cómo incide en elecciones con más categorías en juego”, señaló un especialista en sistemas electorales.
Con diferencias tan ajustadas y la novedad del nuevo sistema de votación, el escrutinio definitivo se perfila como una instancia decisiva para definir el cierre político de esta elección. En distritos clave, unos pocos votos podrían cambiar el reparto de poder en el Congreso.