Por: 7ma Medios

La Legislatura bonaerense sancionó en una sesión que se estiró más allá de las cuatro de la madrugada la ley que habilita al Ejecutivo provincial a tomar deuda por un monto equivalente a más de 3.500 millones de dólares. La aprobación llegó tras semanas de negociaciones entre el gobierno de la Provincia, los bloques aliados y parte de la oposición, mientras que sólo La Libertad Avanza y el Frente de Izquierda se opusieron.

El texto incluye la creación de un fondo para los municipios que se activará de manera automática a medida que ingresen los recursos. Ese mecanismo asignará el 8% de los fondos: un 70% se distribuirá según el Coeficiente Único de Distribución (CUD) correspondiente a 2025, mientras que el 30% restante se orientará a infraestructura, transporte y ambiente entre 2026 y 2027.

El proyecto también contempla una Bicameral de seguimiento económico, integrada por siete diputados y cinco senadores, con participación de las minorías. La comisión podrá solicitar informes al Ejecutivo y convocar funcionarios para monitorear el panorama financiero de la Provincia y los municipios.

El armado de esa Bicameral fue uno de los ejes de mayor tensión. La discusión sobre su composición, el reparto de cargos y el control político del nuevo organismo mantuvo trabadas las conversaciones durante toda la jornada. En paralelo, se abrió otro frente: la pulseada por la reforma del Banco Provincia y la incorporación de nuevos síndicos, un punto que generó resistencias dentro y fuera del oficialismo.

En ese escenario, varios intendentes desembarcaron en La Plata para seguir de cerca la sesión. Uno de ellos, visiblemente molesto por la demora, afirmó: “Si esto no sale, nos fundimos los municipios”, expresó un jefe comunal radical que había viajado más de 350 kilómetros para presenciar el debate.

Otro momento caliente llegó con la irrupción del intendente de San Nicolás, Santiago Passaglia, quien intentó reasumir su banca para votar en contra de la ampliación de cargos. Sin embargo, su pedido fue rechazado por la presidencia de la Cámara. “Si depende de mí voltear la ampliación de cargos, voy a asumir para votar en contra”, sostuvo Passaglia, generando un nuevo foco de tensión.

Tras un cuarto intermedio y un homenaje al fallecido intendente de Berazategui, Juan José Mussi, la Cámara de Diputados aprobó el endeudamiento y envió el proyecto al Senado, que lo sancionó definitivamente cerca de las cuatro de la mañana. Durante el tratamiento, el FIT y LLA cuestionaron el avance de la votación antes del debate, pero desde la Presidencia se argumentó que la maniobra buscaba acelerar el trámite legislativo.

Además del endeudamiento, Diputados aprobó los pliegos para el Consejo de Educación y la reforma de la Carta Orgánica del Banco Provincia, que amplió su directorio y creó nuevos órganos consultivos y de control. En paralelo, también quedaron definidos los cargos del Tribunal Fiscal de Apelaciones.

La votación dejó secuelas políticas. El vínculo entre el PRO y La Libertad Avanza evidenció fisuras, ya que los libertarios mantuvieron su rechazo a los proyectos económicos impulsados por el Ejecutivo, mientras que parte del PRO acompañó con matices. El diputado Agustín Forchieri explicó su posición: “Rechazamos el artículo 1, no porque estemos en contra de tomar deuda, sino porque sabemos para qué la va a usar el gobernador”, señaló. Luego agregó: “Las intendencias son el primer mostrador de los reclamos de los vecinos y necesitan herramientas”, afirmó al justificar el respaldo al fondo municipal.