Novedades | 17 oct 2024
DÍA DE LA MUJER RURAL
Día Internacional de las Mujeres Rurales: «Su labor es vital para alimentar a familias y comunidades»
Las mujeres rurales son clave en la agricultura y la seguridad alimentaria, pero siguen enfrentando invisibilización y desigualdades. Su labor es fundamental para el sustento de familias y comunidades.
Por: 7ma Medios
El martes se conmemoró el Día Internacional de las Mujeres Rurales, una fecha clave para visibilizar el papel indispensable que estas mujeres desempeñan en la agricultura y la seguridad alimentaria, tanto en Argentina como a nivel mundial. Las mujeres rurales representan una fuerza de trabajo crucial, pero muchas veces invisible, cuya contribución va más allá de lo que las cifras oficiales reflejan.
En Argentina, la asesora del Ministerio de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires y referente política de UATRE, Natalia Sánchez Jauregui, subrayó la importancia de estas trabajadoras rurales. «Su labor es vital no solo para alimentar a sus familias, sino también a comunidades enteras», señaló en el marco de la jornada.
Sin embargo, aún queda mucho por hacer para reconocer formalmente su contribución. Según relevamientos realizados por UATRE, muchas de estas mujeres no están registradas y suelen ser vistas como un ‘apoyo’ al trabajo de los hombres, cuando en realidad su aporte es significativamente mayor.
A nivel global, una de cada tres mujeres empleadas trabaja en el sector agrícola. No obstante, estas mujeres enfrentan grandes desventajas que limitan su capacidad para desarrollarse. De acuerdo con un informe de la ONU, las mujeres rurales tienen menos acceso a recursos clave, como la tierra, créditos, educación y tecnología. Si se les brindara el mismo acceso que a los hombres, se estima que el rendimiento agrícola podría aumentar entre un 20% y un 30%, lo que alimentaría a entre 100 y 150 millones de personas más.
DESAFÍOS ADICIONALES
Además de las barreras estructurales, las mujeres rurales deben lidiar con los efectos adversos del cambio climático. Las altas temperaturas y los fenómenos climáticos extremos afectan de manera desproporcionada su producción. «Por cada día de calor extremo, el valor de los cultivos de las agricultoras disminuye un 3% más que el de sus contrapartes masculinos», explicó Sánchez Jauregui.
A pesar de estos desafíos, las mujeres rurales han demostrado una gran capacidad de adaptación y resiliencia. A través de prácticas agrícolas sostenibles, como el uso de semillas resistentes a la sequía y proyectos de reforestación, han encontrado formas de mitigar los efectos del cambio climático, protegiendo tanto su producción como el medio ambiente.
UN LLAMADO A LA IGUALDAD DE GÉNERO
Conseguir la igualdad de género y empoderar a las mujeres rurales es esencial no solo para combatir la pobreza y el hambre, sino también para enfrentar los desafíos del cambio climático. Las mujeres rurales representan una cuarta parte de la población mundial y juegan un papel clave en la conservación de la biodiversidad y la sostenibilidad ambiental.
El lema de este año, «Mujeres rurales como sostenedoras de la naturaleza para nuestro futuro colectivo», destaca la necesidad de reconocerlas como guardianas del medio ambiente y actoras fundamentales en la lucha contra el calentamiento global.
«Es crucial que reivindiquemos su participación en la toma de decisiones dentro de sus comunidades», afirmó Sánchez Jauregui. «Debemos trabajar para crear zonas rurales donde las mujeres cuenten con las mismas oportunidades que los hombres. Solo así podremos construir un futuro más justo y sostenible.»
Las mujeres rurales no solo son proveedoras de alimentos, sino también agentes de cambio que, con su conocimiento y experiencia, están en la primera línea de defensa ante los desafíos climáticos.