Por: 7ma Medios

Los jejenes son insectos muy pequeños, y a menudo invisibles, pero con un simple picotazo doloroso, puede convertirse en un grave problema para la salud de los humanos. Estos insectos diminutos viven en zonas tropicales y subtropicales. Pertenecientes a la familia Ceratopogonidae, los jejenes son conocidos por su capacidad para transmitir diversas enfermedades a los seres humanos, lo que los convierte en un serio riesgo, sobre todo en áreas rurales y costeras.

El principal riesgo que representan estos insectos radica en su capacidad para transmitir virus y parásitos. Entre las enfermedades más comunes que pueden llegar a contagiar los jejenes se encuentran el virus de la fiebre del nilo occidental, la leishmaniasis, y varias formas de arbovirosis (enfermedades transmitidas por artrópodos).

La leishmaniasis cutánea, que afecta la piel y las mucosas, por ejemplo, es una de las enfermedades más comunes en América Latina y Asia, o el virus de la fiebre del nilo occidental, transmitido por estos insectos, que puede causar síntomas graves como fiebre alta, encefalitis y, en casos extremos, la muerte.

Lo que más preocupa de la presencia de estos insectos es su capacidad para proliferar rápidamente en ambientes cálidos y húmedos. De hecho, los jejenes se sienten atraídos por las áreas con agua estancada, lo que favorece su reproducción, y su picadura es especialmente peligrosa durante los meses más cálidos del año. A pesar de su pequeño tamaño, pueden causar irritación en la piel, y sus picaduras son muy dolorosas.

En regiones costeras, el aumento del turismo y el cambio climático favorecieron la expansión de estos insectos. Por otra parte, las picaduras de los jejenes pueden provocar reacciones alérgicas graves, sumando más preocupaciones de salud pública a este ya complejo panorama.

¿CÓMO PREVENIR LAS ENFERMEDADES TRANSMITUDAS POR LOS JEJENES?

Para prevenir las enfermedades transmitidas por los jejenes, es fundamental adoptar diferentes medidas de protección, como el uso de repelentes, ropa adecuada y la instalación de mosquiteros en áreas vulnerables. 

En este sentido, la prevención es clave para reducir el impacto de estos diminutos vectores de enfermedades que amenazan la salud en diversas partes del mundo. Otra acción clave es evitar que se reproduzca la mosca, impidiendo que se acumulen recipientes con agua que permanezcan a la sombra.

Además, es importante tener en cuenta que ante la mordedura de estas moscas, se recomienda aplicar alcohol y evitar rascarse, ya que al generarse lesiones pueden entrar las bacterias al cuerpo y producir infecciones.

FUENTE: NOTICIAS AMBIENTALES